El Palacio de Iturbide, antes conocido como Palacio de Moncada, es una obra maestra del barroco novohispano, construida entre 1779 y 1785 por el arquitecto Francisco Guerrero y Torres. Inicialmente residencia de la familia Moncada-Jaral de Berrio, la casa fue prestada a varios personajes e instituciones, incluido Agustín de Iturbide, quien la habitó durante su mandato como Primer Emperador Constitucional de México entre 1822 y 1823. Tras su paso, el edificio se adaptó a diversas funciones, como sede del Colegio de Minería y ocupado por las fuerzas estadounidenses en 1847. A lo largo del siglo XX, experimentó múltiples usos, desde terminal de diligencias hasta hotel y locales comerciales, enfrentando alteraciones y daños en su estructura con el tiempo.