Elena Manero: Proyecciones de la memoria inaprensible
“La serie de cuadros de Elena Manero que conforman esta muestra pertenecen a su proceso de producción más reciente: Proyecciones de la memoria inaprensible. La artista ha movilizado su obra visual a partir de la convergencia, unas veces tersa, otras veces tensa, de tres dominios creativos: el campo de la pintura figurativa contemporánea, el género inmemorial del retrato y, desde esa perspectiva, el diálogo actual de la disciplina plástica de la pintura con el medio visual de la fotografía. En una búsqueda inteligente por parte de Elena Manero para llevar su obra hacia una zona de mayor complejidad estética y discursiva, lejos del estancamiento de las prácticas derivativas o rutinarias de la figuración estereotípica (definida, desde hace tiempo, como figuración zombi), nuestra pintora articuló este proyecto con componentes muy interesantes: eligió retratar modelos jóvenes, chicas que forman parte de su comunidad coincidente; recuperó y trabajó un archivo fotográfico de procedencia y contenido familiar, de donde seleccionó el corpus de imágenes que proyecta directamente sobre el cuerpo de las modelos en el estudio; y, al final del proceso, desarrolló un protocolo muy personal de aplicación de color para dotar a su discurso figurativo de una identidad post-retratística, post-fotográfica y post-pictórica a la vez”.
─Erik Castillo
Elena Manero (Ciudad de México, 1990) es una artista mexicana con estudios en Diseño y Comunicación Visual (UNAM y UCSB). Obtuvo una Maestría en Bellas Artes (MFA) en la NYAA, Estados Unidos. Asistió a varios talleres en la Academia de San Carlos, Grand Central Atelier y Chelsea Classical Studio. Ha recibido diversas becas y premios, como una residencia artística en la Academia Central de Bellas Artes de China, el Premio Blick y una mención honorífica en la Bienal de Pintura José Atanasio Monroy. Su obra se centra en cuestionar la validez y obsolescencia de las tradiciones culturales, vistas como la normalización de nuestras interacciones, un juego para construir y entender nuestra identidad. A través de la pintura, busca desafiar el rol del naturalismo, donde la realidad no se entiende ni se experimenta de manera literal o factual, sino con un giro metafórico o poético. De esta forma, cuestiona qué hace que un retrato sea un retrato hoy en día, cómo nuestra contemporaneidad está formada por la tecnología y cómo esta puede ser utilizada como herramientas y referencias, como la fotografía. La obra de Manero ha sido exhibida en instituciones y galerías de México y el extranjero, incluyendo el Museo de Antropología de Xalapa, Museo de la Cancillería, Museo de Arte Contemporáneo Ateneo de Yucatán, Museo de Arte Contemporáneo Primer Depósito, Sotheby’s, Flowers Gallery y el Cheng Xi Center of Contemporary Art.
