Raphaela Vogel. I Have No Questions, I Have Only answers.
Raphaela Vogel (1988, Nuremberg, Alemania) recurre a diversos medios y materiales para concebir instalaciones que entrelazan la escultura, el sonido y el vídeo. La artista construye narrativas desasosegantes y perturbadoras en las que a menudo se incorpora a sí misma, y reflexiona sobre el antiguo concepto griego de hybris —la falsa creencia de los seres humanos de poseer cualidades divinas— cuestionando la manera en que los artistas ejercen su derecho a expresarse. De alguna manera también alude a la soberbia profundamente cobarde, siendo el estado de hybris equiparable a su opuesto igualmente erróneo: su completa negación.
El título de la muestra No tengo preguntas, solo respuestas se presenta como una provocación que busca conciliar las problemáticas éticas y estéticas implícitas en la producción artística, y plantea interrogantes sobre cómo la obra debe relacionarse tanto con los materiales y la infraestructura que utiliza, así como con el contexto en el que se inserta. En el patio del museo, No tengo preguntas, solo respuestas, una nueva obra de Vogel homónima al título de la exposición, introduce un símbolo de interrogación hecho en bronce que vincula estas reflexiones con hallazgos en la historia de la música, como los orígenes del punk rock en la banda mexico-estadounidense de la década de 1960, ? (Question Mark) & The Mysterians. La pieza insinúa las conexiones conceptuales entre la trayectoria musical de Vogel y su práctica, donde convergen ideas de una investigación intensiva en arte, música y poesía.
Curaduría por Lena Solà Nogué.

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